- Para un número importante de empresas tecnológicas colombianas, México es el mercado internacional de ensueño y el destino perfecto de arranque para su expansión global.
- El tamaño del mercado, la competida estructura de negocios, la cercana vinculación con los mercados globales y la variada segmentación socioeconómica hacen de México el laboratorio ideal para el despegue global de las startups colombianas.
- Además de Rappi, empresas como Tul, Frubana, y Chiper han hecho del mercado mexicano su plataforma de despegue con excelentes resultados.
“El ecosistema StartUp colombiano, que ha sacado promesas de la industria como nuestros amigos de Frubana, Chiper, Laika y TodosComemos, entre muchas otras, le debe mucho a Rappi pues ellos nos abrieron el camino a un mundo que era completamente desconocido para todos. En nuestro caso, nos acercaron a inversionistas, nos apoyaron tecnológicamente y sobre todo, nos dieron a entender los aciertos y desaciertos que tuvieron hace 6 años cuando entraron a México”, comenta Andrés Ramírez, Gerente de Expansión y Asuntos Públicos de Tul, empresa tecnológica colombiana que se ha dado a la misión de digitalizar el mercado ferretero en América Latina y el mundo.
Tul, que ingresó al mercado mexicano en marzo de 2021, ha asumido un compromiso de largo plazo con el país, como una forma de consolidar su crecimiento internacional y con ello explorar después nuevos mercados. Al igual que las más importantes empresas tecnológicas de origen colombiano, México se ha convertido en una plataforma de despegue regional y global para Tul, que hoy incluso sueña con conquistar países en África y el Sudeste Asiático, que tienen una estructura similar de la industria ferretera.
Por ahora, la empresa quiere consolidar su presencia en la capital del país con la apertura de un total de 4 almacenes, emplear a cerca de 500 personas a corto plazo y llegar a mercados como Guadalajara en unos meses y a Queretaro, Puebla y Mérida el próximo año. Tul prevé así atender a más de 15.000 ferreteros en la región, a los que además planea acompañar para que gradualmente ofrezcan servicios de más valor. La visión de la empresa es que un ferretero claramente pueda comprar un bulto de cemento o un martillo, pero también alquilar equipos y herramientas de construcción, financiar a sus clientes para mejorar su vivienda o reciba el pago de facturas por diversos servicios, con el fin de mejorar los ingresos de los ferreteros y apoyar a sus comunidades.
Con sus miles de ferreterías y tlapalerías tradicionales, ubicadas en cada esquina del país, México se vuelve ideal para aplicar, probar y escalar el modelo tecnológico y logístico de Tul. Esto es cierto también para otras empresas de tecnología, que descubren en nuestro país una cantidad interminable de potenciales puntos de venta, que además conviven con un ecosistema industrial potente y de clase mundial.
Nicolás Villegas, Cofundador y CTO de Tul, está convencido de que, si no fuera por la tecnología, ni Tul ni ninguna otra empresa lograrían innovar en sectores tradicionales como el ferretero, donde el objetivo hoy debe ser el de acortar el camino entre los grandes productores, los pequeños vendedores y el consumidor final, para lograr eficiencias significativas, mejorando la calidad de vida de nuestros usuarios y sus clientes.
“La tecnología no solo nos permite tener valores agregados muy fuertes sino también, entender como nadie a nuestro cliente y sobre todo, ayudarlo a vender más, pues no sólo nos preocupamos por su abastecimiento sino también, le traemos tecnología para aumentar sus ventas y ganancias.” resaltó Villegas.
Además de todo el know how tecnológico que Tul ha logrado captar de su “hermano mayor” Rappi, sin duda alguna está siguiendo sus pasos: Colombia fue la cuna, México el trampolín y el cielo es el límite. En 3 años o menos esperan ingresar a la selecta categoría de empresas Unicornio o, en otras palabras, estar valorados por encima de los mil millones de dólares para así en 5 años mas o menos, estar en cotizando en Wall St.
Con información de Cadena Política